Hola miraculers, soy yo una vez más intentando involucrarme más a fondo en esta bella comunidad, espero y estén degustando de mis primeros contenidos y los que faltan por redactar. (✷‿✷)
Primeramente recalcó que este blog no solo es para postularme al team Blue de la comunidad sino que también para darles un lindo one-short para leer y dejar volar su imaginación, cabe mencionar que este relato tiene que ver con los universos de Miraculous y la serie anime Boku No Hero Academy, espero lo disfruten. (Un poco más de Boku No Hero que Miraculous).
Por cierto, los personajes no me pertecen, créditos a sus respectivos autores a los que agradezco por tan bellas series que nos dan vida y entretenimiento.
Pov Narrador
— No es un lugar para niños pero, bienvenida - dijo el hombre tras abrir la puerta de la casa
La pequeña miro el interior con algo de temor, de pronto todo se iluminó, el señor había encendido la luz del lugar y justo al lado del apagador la invitó a pasar adentro.
Temerosa paso con la pequeña maletita con ropa que los jóvenes de la clase 1-A la habían llevado a comprar.
La noticia de que el profesor Aizawa Shōta de la prestigiosa escuela U.A; cuidaría de la pequeña Eri asombró a todos e incluyendo al ahora tutor de la niña. Esto fue decretado por el director en una prevención sobre el gran poder de la menor, su don rebobinar era algo peligroso por lo que debería estar el mayor tiempo posible con el gran EraserHead para si en algún momento su don llegase a activarse, él podría actuar inmediatamente eliminando su poder con una mirada, ganando el tiempo suficiente para auxiliarla y evitar que se den percances mayores.
El hecho de vivir de nuevo con alguien adulto, sola y sin opción la asustaba por completo, no sabía nada acerca de él y por lo que había visto al lado de Mirio e Izuku, noto que el señor era amable pero muy callado. El estar allí en su casa con él, le daba temor de que fuera igual a Chisaki, no quería volver a ese encierro total lleno de oscuridad.
Sus lindos rubis observaban el lugar, miro detenidamente la pequeña sala con un gran televisor, tres muebles, una alfombra, una pequeña mesa de centro, también había una pintura de un paisaje en la pared además de un esquinero con una lámpara. La gran ventana que daba a la calle con cortinas de color crema hacían juego con los sillones café oscuro, extrañamente la sensación a comparación de con Chisaki era distinta, se sentía cálido y hogareño.
El hombre la mira inexperto y también asustado, usualmente se encontraba siempre solo, el llegar a su casa en compañía le era extraño y más el de una niña. No sabía muy bien tratar con niños, debido a que estaba a acostumbrado con adultos y los jóvenes de preparatoria, se encontraba fuera de su área y no sabía cómo actuar ante ella sin mencionar el trauma que debería tener sobre los adultos debido a Chisaki.
Salió de sus pensamientos al ver la tímida mirada que la niña tenía sobre él, tragó saliva sutilmente sería algo complicado.
— Prepararé algo de cenar, pero antes te llevaré a mi habitación, al parecer la tuya aun no esta terminada - comento dándole la espalda y caminando por un pasillo
La pequeña sin decir algo lo siguió, tenía miedo; era algo que no negaría pero, confiaba en sus amigos. Todos le dijeron que el Sr. Aizawa era amable y bueno, debía confiar aunque le fuese difícil.
Al entrar a la habitación con colores suaves y oscuros, su mirada viajo por todo el cuarto.
El azabache tomo una almohada junto una cobija dejando lo demás acomodado para que ella gozará de su gran colchón.
— Dormiré en el sillón, cualquier cosa que necesites hay un baño allá - apunto hacía una puerta
La pequeña asintió en señal de haberlo escuchado
— De acuerdo, iré a hacer la cena. Puedes cambiarte para dormir - dijo saliendo de allí
Se acercó lentamente a la gran cama, no era como en la U.A, antes de llegar con el profesor, la pequeña Eri dormía en los dormitorios de la escuela junto a los estudiantes bien conocimos como los tres grandes (Nejire, Tamaki y Mirio) próximos a graduarse y ser héroes profesionales.
Desde la cocina se encontraba algo tenso, el no saber cómo acercarse a la joven, lo consumía en una depresión, además de incomodidad. El recordar cómo sus estudiantes libremente se expresaban y socializaban sin ningún problema con la albina le resultaba extraño de entender.
Sin mencionar que ahora siendo su tutor, él tendría que ser como un padre. ¡¿Cómo diablos haría eso?!
No había ningún ruido en la casa, solamente el leve sonido de la flama de la estufa, preparo algo ligero y que sabía que a la pequeña le gustaba, Sato su estudiante le dió algunas recetas que en el último mes había preparado a la pequeña, la cual siempre sonreía al degustar de sus platillos.
¿Sonreirá de la misma manera con él? Se pregunto mientras apagaba la llama de la estufa y acomodaba la mesa para cenar.
¿Debería de hablar algo durante la cena? En los dormitorios siempre observaba a sus alumnos cenar con ella, todo era ameno y sociable e inclusive su estudiante de pésimo carácter cenaba allí y lograba comunicarse con la de ojos rubí, eso sin duda lo sorprendió.
— Señor - dijo en voz baja y temerosa la pequeña aun lado de él trayendo lo a la realidad
— Disculpa, está distraído - dijo poniendo la comida en la mesa — toma asiento - su voz gruesa alertaba a la niña pero ella accedió a tomar el asiento que el ofreció mientras hablaba
— Gracias - agradeció tiernamente con timidez
Por su parte, el de ojos oscuros se sentó al otro lado de la mesa quedando de frente con ella. En silencio, la chica comenzó a comer tranquilamente pensado si debía o no hablar.
Y todo se mantuvo en silencio, nadie dijo nada y de vez en cuando sus miradas se cruzaban.
Esa había sido la primera de muchas noches de incomodidad y dudas.
— Dinos Eri-chan ¿Que se siente vivir con Aizawa sensei? - dijo la chica invisible
— Bueno... - hablo tímidamente ante el grupo que la rodeaba
— Debe de ser super aburrido - comento el chico rubio haciendo una nueva de desagrado
— El señor es muy amable - confesó la infante con una pequeña sonrisa
— ¿Señor? Kero - dijo Tsuyu
— ¿Porque no lo llamas por su nombre nena? - atrajo su atención la subdelegada del grupo
— Es que no sé... - la interrumpió el más bajo del salón
— De seguro es tan amargado que le dijo que le llame así
— No lo creo - respondió Sero a Mineta - lo más probable es que no tengan buena comunicación
— Exacto - apoyo Mina — recuerden que Aizawa sensei es muy callado
Mientras tanto afuera del salón, dos profesores escuchaban atentos...
— Es solo una niña - hablo el rubio — sé más natural, digo después de todo legalmente eres una padre, le diste tu apellido - respondió ante la mirada de su amigo
— Pero yo no soy de esos papás tan afectivos - dijo con desinterés
— Involucrate poco a poco con algo que a ella le guste
— ¿Cómo qué?
En eso escucharon un grito de adentro del salón, era la niña
— Me encanta Bakugou-kun - excalmao con felicidad llamando la atención de los adultos
— Si, si, si como sea - grito el chico con sus manos en los bolsillos, todo su grupo lo miraba asombrado a excepción de una castaña — lo ví por casualidad y Ochako quiso traerte lo - pronunció a la peli blanca bajando la voz y con un ligero ardor en sus mejillas
Se trataba nada más y nada menos que de una bolsa de colgadera, de color rojizo con motas negras que daban al objeto un aspecto de una mariquita.
— Wow Bakugou, que varonil al traerle algo a Eri - lo alago causando algo de molestia en el rubio
Sin embargo, fue más vergüenza, pero nadie lo percibió asi, salvó por una chica de ojos chocolates.
— ¡SHINEEEE! - grito su típica frase golpeando en la cabeza al pelirrojo
Aunque había dicho que Ochako quería dársela, una parte de él también quería puesto que en cierta forma le recorba a Mahoro
Fuera del salón el amigo del maestro del grupo sonrió
— Allí tienes hasta tu alumno te gana - se burló — intenta hablar con ella sobre Ladybug
— ¿Lady qué?
— Es una serie, ahora que lo recuerdo he visto que muchos le regalan cosas así, supongo que le gusta; es sobre dos héroes de origen francés - intendanto recordar más
— Creo que la vi el fin de semana ponerla en la televisión - aclaro el azabache
Flashback
— Señor - algo jalo su pantalón, miro había a abajo y observó a la causante
— ¿Si Eri?
— ¿Puedo poner un programa en la televisión?
— Claro - dió su autorización y la pequeña sonrió corriendo a la sala
El desde la cocina la observó, en silencio tomo el control y realizó lo debido para colocar el programa que quería
De pronto, una canción de escucho en la sala. Ya tenían una semana viviendo juntos, ahora su casa era más ruidosa, sin quererlo sonrió ante la calidez que se sentía en el ambiente.
— Miraculous :notes: - escucho de pronto a la pequeña cantar en el sillón —descrubre el poder del amor
Su suave y dulce canto lo regocijo sin darse cuenta, su voz se escuchaba tan alegre como con los demás, no había algo diferente. El verla reír, cantar y bailar lo hizo sentir feliz, debido a que ella estaba así por su causa y eso le agrado.
Fin del flashback
— Hey Aizawa ¿En qué piensas? - lo vio desconcertado
— Nada, ya llévate al grupo a práctica, es su última clase del día y yo ya tengo que irme
Entro al salón y todos corrieron a su lugar, miro a la niña con un brillo en sus ojos al tener puesta la bolsa que sus alumnos (Ochako y Katsuki) le dieron, algo que le hizo sentir molestia, pero decidió ignorar el sentimiento
— Eri, vámonos
— Si señor - dijo para tomar sus cosas y despedirse de la clase 1-A
— A partir de mañana, iniciaremos tu educación - anuncio a la pequeña quien comía tranquilamente en la mesa
— Claro, señor - esa palabra una vez más, lo molestaba, lo inquietaba, ¿Porque una relación de usted? Quería cambiar eso, pero ¿Cómo?
Por primera vez, su actitud fría y reservaba se fue por un tubo, tenía que hacerlo ...
— Eri
La chica lo miro — ¿Si señor?
— Ah - su corazón se aceleró, una calidez abrumó su pecho al ver esos lindos ojos que lo miraban a él y solo a él — puedes decirme Sr. Aizawa - temrino por decir volteandose a otro lado ocultando su sonrojo
— Si señor Aizawa - dijo con una sonrisa la niña recogiendo su plato
El sonrió al ver cómo corría al baño a lavarse los dientes, una vez hecho eso iba a la cama y veía el televisor.
Se recargo en la puerta de la que era su habitación, la felicidad que emanaba se le contagiaba
— ¡Es hora de terminar con la maldad! - grito de pie en la cama causando una risa en el adulto que la veía — Ah - la risa la asustó haciéndola perder el equilibrio
Corrió hacia ella antes de que cayera al suelo, ambos se encontraban en el piso. Los grandes brazos del hombre la cubrirían sin apretarla, la calidez que sintio en ese instante era diferente al calor que sintió con Deku-kun.
— ¿Estás bien? - pregunto liberando la de su agarre poco a poco
— Si - dijo mirándolo
Él se puso de pie y con cuidado la levanto causando un sonrojo en sus mejillas, la sentó sobre la cama como si fuera una linda muñeca de porcelana.
— Lo lamento mucho Sr. Aizawa - agachó la cabeza y apenada le hablo
— No pasa nada, ambos estamos bien - fingió desinterés, en realidad, se encontraba preocupado ella pudo haberse lastimado — descansa, mañana irás a la escuela - anuncio mientras apagaba el televisor
— Si, buenas noches Sr. Aizawa - comento acomodándose en el colchón
— Buenas noches Eri - le respondió mientras suavemente la acobijaba
El día en la escuela iba de maravilla, la niña había llegado luciendo su uniforme junto la bolsa que Bakugou y Uraraka le dieron.
Aizawa se había encargado de primaria en dos colectas, le dió el desayuno, le compro mochila y útiles casualmente de su serie favorita Miraculous Ladybug; también la llevo a la escuela.
Al llegar miro como muchas personas, se despedían de los niños, le pregunto a Aizawa y él le respondió que era una relación entre padres e hijos.
Ante la respuesta que le dió, ella por un momento se familiarizó con eso, quiso tener algo así puesto que todos los niños se veían contentos.
Sin pensarlo demasiado, giro hacía a él. Corrió dulcemente y lo abrazo desde las piernas causando un leve tambaleó en el mayor.
— Nos vemos más tarde - dijo tranquilamente iba a decir esa palabra que en ocasiones quería decirla pero, no lo creyó correcto
El pequeño bulto entre sus piernas, se fue de un momento a otro dejándolo con una reacción bastante extraña, el ardor que sintió en sus mejillas iba desvaneciendo poco a poco. Desde luego algo no le convencía del todo en dejarla aquí. El trayecto a la U.A le pareció eterno sin su compañía, ya era un hábito el oírla cantar alegremente, ahora solo había el ruido de los carros a su alrededor.
— Todo estará bien, para eso la entrene - se dijo en voz alta dentro del vehículo recordando cómo le había ayudado a la pequeña a controlar su kosei y en dado caso de que no pudiera detenerse las medidas que debía de emplear para no provocar daños mayores
Eri dentro del salón se sentía extraña, más aún por qué por ningún lado encontraba la mirada azabache que siempre la vigilaba y cuidada, por primera vez se sentía sola, triste y sin duda lo extrañaba a él. Sus brazos y pecho se habían vuelto un hogar y sin él a su lado como de costumbre, experimentaba miedo.
Miedo de no volver a verlo, miedo de estar sin él... ¿Y que tal si la abando allí? ¿Si esto es un paso para dejarla por su cuenta en la vida? ¿Para esto la entreno, para dejarla sola? Sus ojos de un momento se cristalizaron ante tales pensamientos y pánico, un gran sonido la alertó, alejando todo pensamiento.
Desde su lugar, vio que todos los niños del salón salian a lo que era un patio, tomo su almuerzo, que le habían preparado. Al salir, no cruzó palabra con nadie, prefirió sentarse debajo de un árbol y comer tranquilamente; de esta forma no podría rebobinar a nadie.
El señor Aizawa, le comento sobre como las emociones y el como uno se siente podría llegar a afectar los quirks de las personas, por lo que debería tener precaución si llegara a sentirse demasiado emocional.
Al dar mordisco a su emparedado, miro el cielo y las nubes, sonrió al pensar en como la comunicación entre ella y ... Su papá, era más sólida, eso le agradaba. Al pasar bocado, se dió cuenta de qué la socialización no era el fuerte del hombre sin embargo, no olvida el hecho de como el intento acercarsele.
Flashback
— Ah este, ¿De qué es el programa? - cuestionó a la de largos cabellos plateados mientras tomaba asiento con ella
Ella lo miro curiosa, ¿Estaba intentando hacer conversación con ella?
Varios de la clase 1-A le habían, lo difícil que podría ser para el Sr. Aizawa el expresar sus opiniones o sentimientos tan abiertamente e incluso el Sr. Mic le comento que el solía ser muy callado, pero que poco a poco demostraba su cariño por los demás a su extraña manera de pocas palabras.
La pequeña dió una gran sonrisa al tenerlo a su lado
— Ella es Ladybug, es una super heroína - comenzó a relatar mientras ambos miraban el televisor lleno de colores — es muy buena, amable, talentosa y tierna a lo igual que Cat Noir, jajaja. Aunque él es más sociable me recuerda a usted Sr. Aizawa; me encantan los colores también ah y el personaje de Lila me recuerda al chico Monoma jejeje - con eso se acercó al adulto y se acomodo en su regazo
Ante el tacto, él se tenso un poco. Pero, la pequeña no se quitó y la sensación de soledad se esfumó, le pareció raro al principio pero sin duda se acosteumbo a la niña, no solo era una responsabilidad par él. Ella era suya, era su hija a pesar de no plantar la semillita para que existiera se alegraba que su existencia estubiera en presencia de él, era suya y el de ella.
Ahora en adelante, él cuidaría de ella, la protegería, sin duda espantaría a los novios y pretendientes, la impulsará a qué logre su sueño, la esperara siempre en casa, será su apoyo incondicional y la haría florecer porque desde ahora era su hija y era la flor más bella que podía estar dentro de su jardín.
No escuchaba lo que decía la niña con una sonrisa, debido a estar pensando, pero la imagen de verla hablando con un gran brillo en sus ojos era grandioso y se sentía jodidamente bien.
No existía duda alguna otra él, ella había nacido para él y él para ella.
— Esas joyas les dan sus poderes con ayuda de los kwamis - aclaro como toda fan de una serie — además de ser orientados por el maestro Fu, como tú me enseñas pa.. - callo al darse cuenta de lo que diría apenada continuo mirando la tele
Él no dijo nada, no sabía que decir desde luego, no cabía de la felicidad al solo pensar que ella por un momento lo iba a llamar papá.
Fin del flashback
— Mirio-san dijo que eso sería él para mí ahora comprendo a que se refería - con un leve sonrojo dijo para si misma — es tan lindo tener una familia, quiero ser como él de grande
— Oye - una voz ajena la llamo
— ¿Tu eres la nueva no es así? - dijo otro
Un grupo de niños se acercaron a donde estaba, les dedico una sonrisa y se presentó, siguiendo los pasos de la linda Marinette, eso la llenaría de amigos.
— Hola, si soy nueva, mi nombre es Eri - sonriendo sin soltar su emparedado se puso de pie para esta a la altura de los demás
Nadie le regreso el saludo, los 3 niños junto a una niña sonrieron de forma distinta a ella. La mirada de todos reflejaban a los personajes malos de la serie, eran nada más y nada menos que Chloe y Hawk Moth, cuando sonreían y algo malo sucedía.
Su mirada de alegría cambio por una de horror, sabía lo que significaba, algo rotundamente malo, ellos no querían ser sus amigos querían poner autoridad y era demasiado tarde para huir.
— Debes de aprender que los más fuertes mandan aquí - alardeó el niño tratando de intimidarla
Sus ojos rojos perdieron todo brillo y esperanza, no más maldad, todo iba tan bien ... ¿Porque había personas así? Papá dondes estás, te necesito, ven pronto por mí; fue lo último que pensó al cerrar sus ojos.
— Bien, se terminó el tiempo - hablo el profesor al grupo — alguien tiene la respuesta al problema - algunos estudiantes levantaron la mano
Pero una persona abruramente abrió la puerta alarmando a todos, su pecho subía y bajaba, trataba de recuperar el aliento para informarle y entre jadeos lo hizo
— Aiz.. Aizawa ... Tienes que ir a la primaria ah de prisa - sin decirlo dos veces la mirada del mencionado se ensanchó al escucharlo
Por primera vez sus estudiantes lo vieron cabreado, sin decir nada, corrió fuera del salón, no perdería tiempo en explicasiones. Su corazón latino muy fuerte, la desesperación lo abrumó y el temor de perder lo que había obtenido se hizo presente.
Quito todo conocimiento negativo de la situación, él era un héroe profesional y por ella sería capaz de ser super héroe Cat Noir, sin duda alguna no la defraudaría, jamás.
Al llegar al lugar, busco por todos lados, la maestra lo recibió tranquilamente algo que lo desconcertó
— ¿Ella está..
— Su hija está bien Señor Aizawa
— ¿Cuál fue el problema? - pregunto más tranquilo
— Por favor sígame - en silencio la acompaño al salón donde había 4 parejas de padres de familia esperando
— ¡Es usted un mal padre! Cómo se le ocurre enseñarle a pelear a su hija ¡Está loco! - grito una mujer
— Cariño tranquila - aconsejo su marido con el entrecejo muy ligeramente fruncido mirando con cierto odio al recién llegado
— Como vera Sr. Aizawa, su hija Eri golpeó a los hijos de estas parejas, entendemos que los niños deben defenderse pero ¿Enseñarle a pelear desde muy temprana edad no es algo extremista?
— Con todo respeto, conozco a ..
— Si, si la conocerá mucho, pero eso no es motivo para romperle la nariz a MI hijo - protesto otra madre
— ¡Papá! - el grito de la niña hizo para la reunión de los mayores
Al reconocer su voz, salió al pasillo y la vio correr hacia él, con lágrimas salgo hacia sus brazos
— Papá - decía nerviosa una y otra vez aferrándose más a él
Con una enorme dicha la abrazó, la apego a él y suavemente susurro en su oído
— Estoy aquí para ti ¡My lady!
La pequeña en sus brazos detuvo su llanto, se separó lentamente de él y lo miro a los ojos, ese era el apodo que de cariño Cat Noir le decía a Ladybug, la niña se sonrojo y sonrió aún más, paso sus delgados brazos por el cuello del azabache y lo abrazo
— Te quiero papá - susurro en su oreja
— También te quiero
Tomándola en sus brazos, camino hacia los padres y firmemente dijo
— Mi hija - Eri sintió felicidad dentro de su pecho, el sentimiento de familia y hogar se hacía más fuerte y no quería que eso terminará — sabe defenderse y también sabe lo peligroso que puede llegar a ser por lo que si ella actuó así fue por qué la situación lo requirió
Una madre iba a respóndele en cuanto los niños llegaron de la enfermería
— Mamá, el señor tiene razón - dijo la chica
— Si, nosotros la molestamos, primero le tiramos su almuerzo y le dijimos usar su quirk pero ella se negó y la quisimos obligar - confesaron muy apenados todos
Al verlos Eri se entristeció, no le gustaba hacer daño a nadie, pero de no hacerlo ella pudo salir perjudicada.
— Sr. Aizawa puede retirarse - dijo la maestra y el mencionado agradeció y disculpo por las heridas de los niños y ellos de igual forma se disculparon con Eri además de recibir un buen remiendo de la maestra y sus padres
El trayecto a casa fue silencio, algo tenía. Al ingresar en la sala antes de que él hablará, ella lo miro y tomo la delantera ...
— Me gusto ir a la escuela, pero no me gustó el lastimarlos, si no hubiera sabido eso creo que ante el miedo de ser lastimada hubiese activado mi quirk - hizo una breve pausa y miro sus manos — me alegra mucho tenerte y aprender de ti, perdón por como lo llamé en la escuela Sr. Aizawa. Hay algo que me gusta de esto, tu me cuidas, alimentas y proteges, me siento feliz, siento que tengo un lugar a donde ir y estar segura, la verdad me dió miedo perderlo, crei que me dejaría allí para valerme por mi misma debido a que me enseña a contralar mi quirk y defenderme, pero lo cierto es que quiero estar con usted Sr. Aizawa - confesó la niña agarrándose de su pantalón tímidamente
La aparto un poco y se puso de cunclillas para estar a su altura, la tomo del mentón y dijo
— Créeme que jamás te dejaré, eres My lady, mi hija y siempre te cuidaré porque te quiero Eri y por favor dime papá todas las veces que quieras - ante tales palabras a pesar de sonar algo serías debido a la personalidad de Aizawa a la pequeña le encantaron
— Te adoro papá, pense que no llegarías - confesó mientras lo abrazaba
— Y perderme algo de ti, por supuesto que no My lady - agrego correspondiendo en el abrazo
A partir de ese momento, su relación fue más abierta entre ellos, poco a poco la confianza iba en aumento, toda duda o temor era exterminado, formando un bello y dulce hogar.
— Adoro los finales felices - mirando al padre e hija
— Awwwww yo tambien Bogabuu - al lado suyo
— ¡Nos vemos! Ladybug y Cat Noir fuera
¡Muchas gracias por llegar a hasta aquí! Espero hallan disfrutado del one-short
También pueden encontrarlo en mi perfil de Wattpad, lo titule ¡My lady!
Y a los del team, les agradezco si me leyeron y me encantó participar en este reclutamiento.
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