<img src="https://sb.scorecardresearch.com/p?c1=2&amp;c2=22489583&amp;cv=3.6.0&amp;cj=1">

Ocurrió de noche.

Author's Avatar
Danthe 14 days ago
2
0

“No era mi noche... pero casi”

Yo soy... no inporta quien soy mucho ahora. Y te voy a contar algo que viví un viernes, noche de luna llena. Esa luna blanca como hueso, que alumbra tanto que parece que despierta hasta las almas del monte. Volvía de laburar tarde, cansada... pero tranquila. Aunque en el aire ya se sentía algo raro.

El barrio estaba callado. Demasiado callado. Y no es normal, menos un viernes. Acá siempre hay ruido: vecinos afuera, música, risas, motos, hasta discusiones. Pero esa noche, nada. Ni un alma. Como si el mundo estuviera aguantando la respiración.

Cuando llegué frente a mi casa, saqué el llavero, ese manojo enorme con llaves de todo tipo. Justo cuando metía la primera en la cerradura, los perros del barrio empezaron a ladrar como locos. Uno primero, después todos juntos. Pero no era un ladrido común... era como de aviso. Como si algo se acercara.

Ocurrió de noche.-“No era mi noche... pero casi”

Yo soy... no inporta quien soy mucho ahora. Y te voy a contar algo que viví

Entonces lo vi.

Un tipo venía caminando por la calle. Alto, flaco, con la ropa colgando, el cuerpo torcido. Caminaba como si le pesara la piel. Me quedé quieta, con la llave en la mano. Algo en el pecho me decía: No lo pierdas de vista.

De repente empezó a toser.

Primera tos. Probé la primera llave. No era.

Segunda tos. Metí la segunda. Tampoco.

Tercera... y ahí no fue tos. Fue un aullido. Fuerte. Seco. Profundo. Como si saliera del fondo de la tierra. Sentí un hielo que me bajó por la espalda. Hasta los perros se callaron de golpe, como si el miedo les apretara el hocico.

El tipo se dobló. Y ahí hizo una virá-cambota. Una vuelta rara, violenta, como si los huesos se le quebraran solos. Se tiraba al suelo, se sacaba la ropa a manotazos, se retorcía como si algo lo estuviera rompiendo por dentro.

Tercera llave… tampoco. Yo temblaba.

Hizo otra virá-cambota. Esta vez ya no era del todo humano. Le empezaba a salir pelo oscuro, espeso. Los brazos se le alargaban, los ojos le brillaban como brasas, y los dientes... ¡ay, los dientes! Se le afilaban como puñales.

Cuarta llave. Nada.

Y en la tercera virá-cambota, ya era otra cosa. Un lobizón. Enorme. Con las patas abiertas, la boca chorreando baba, los ojos clavados en mí. Los perros se le tiraron encima, lo atacaban entre varios. Pero el bicho gruñó con una furia tan fea que todos se escaparon chillando, con el rabo entre las patas.

Y ahí me miró.

Me miró como si supiera mi nombre. Como si pudiera oler el miedo en mi garganta. Y empezó a venir, despacio pero decidido, como un mal sueño que no te deja despertar.

Quinta llave… no.

Sexta... tampoco. El bicho ya estaba cerca.

Séptima llave... y la puerta abrió.

Me metí de un salto, cerré con traba, pasador y todo lo que tenía. Afuera, el lobizón se frenó. Respiraba pesado. No arañó, no gritó. Solo se quedó un rato. Y después, se fue.

Esa noche aprendí algo: en Misiones, cuando hay silencio raro, cuando los perros lloran y un tipo hace virá-cambota en medio de la calle, no es teatro. Es el monte hablando. Y si escuchás tres tos seguidas, no pierdas tiempo.

Corré.

#Danthe

Linked Wiki Entries

Likes (2)
Comments (0)

Likes (2)

Like 2

Comment

    Community background image
    community logo

    Into Poetas & Escritores? the community.

    Get Amino

    Into Poetas & Escritores? the community.

    Get App